Gestionar emociones

En la educación oficial se da mucha importancia  a los conocimientos, sin embargo no se hace hincapié  en la educación emocional.
 

Los niños necesitan  como pilares para poder crecer sanamente:

ü  Amor

ü  Protección

ü  Seguridad

No enseñamos a nuestros niños a reconocer lo que sienten, entenderlo y gestionarlo. Pero, ¿cómo podemos enseñar lo que no sabemos?

A mi modo de ver, se da poca importancia a la gestión de nuestras emociones. Por ejemplo, cuando un niño se enfada, en muchas ocasiones sus padres o educadores le dicen “eres un niño malo”, con lo cual lo que el niño traduce es “cuando me enfado, tengo que ocultarlo, porque no es aceptable en mi familia este comportamiento”. Si queremos que nuestros niños crezcan con confianza y seguros de sí mismos, es necesario que nosotros mismos nos conozcamos y nos aceptemos. Una buena gestión de nuestras emociones permite enseñar a nuestros educandos que se les permite enfadarse, pero no se les permite que lo manifiesten de manera inadecuada con actos violentos o agresivos.